Antonio Gates salpicado en presunto escándalo de apuestas
La línea entre el entretenimiento y la controversia parece difuminarse en el deporte profesional. Esta vez, la NFL podría verse arrastrada a un nuevo escándalo que amenaza con manchar su reputación.
El nombre de Antonio Gates, leyenda de los Chargers e integrante del Salón de la Fama, ha surgido en medio de una investigación federal por presuntas partidas de póker amañadas en Miami.
Según el periodista Pablo Torre, Gates habría “organizado y participado en una partida de póker amañada”, aunque su papel exacto aún no ha sido esclarecido. El caso estaría vinculado a Curtis Meeks, acusado formalmente por el gobierno estadounidense tras un escándalo similar que ya golpeó a la NBA la semana pasada.
Gates, de 45 años, fue ocho veces Pro Bowler y tres veces All-Pro del Primer Equipo, además de uno de los alas cerradas más prolíficos en la historia del fútbol americano profesional. Su ingreso al Salón de la Fama en agosto de 2025 coronó una carrera de 16 años con los Chargers.
¿Qué relación tiene Gates con el escándalo de la NBA?
Las autoridades federales han vinculado los presuntos juegos de póker manipulados con Chauncey Billups, Terry Rozier y Damon Jones, quienes habrían sido arrestados por su implicación en partidas alteradas mediante herramientas tecnológicas.
Torre reportó que la presencia de Gates en la mesa habría funcionado como un “señuelo”, atrayendo jugadores a partidas de alto riesgo que no eran tan justas como parecían.
¿Podría la NFL enfrentar un nuevo golpe a su integridad?
Aunque Gates no ha sido acusado formalmente ni mencionado en los expedientes judiciales, su nombre en esta investigación levanta serias dudas sobre los controles de integridad dentro de la liga.
Fuentes cercanas a la NFL aseguran que el tema ya se encuentra bajo revisión interna, dado que la liga mantiene una política estricta sobre las apuestas deportivas.
¿Qué sigue para Antonio Gates tras la polémica?
Pese a las acusaciones, Gates continúa vinculado a los Chargers como Embajador de Leyendas, manteniendo su imagen como referente de la franquicia. Sin embargo, el impacto mediático del caso podría alterar su legado si las investigaciones confirman su participación.
Por ahora, la NFL y el propio Gates guardan silencio. Pero la pregunta queda abierta:
¿podrá una de las figuras más respetadas del fútbol americano limpiar su nombre antes de que este escándalo crezca?
