Bologna arruina el sueño de Copa Italia al AC Milan y a Santi Giménez
Todo indica que el AC Milan y Santiago Giménez serán las grandes ausencias en competencias europeas en la temporada 2025-2026. La única esperanza de los Rossoneros de asegurar un lugar en la Europa League.
Bologna se impuso 1-0 al AC Milan para conquistar la Copa Italia 2024-2025, y con ello, sellar su boleto a la Europa League, por lo que los rossoneros sólo se conformarán con luchar sólo por el Scudetto de la siguiente campaña.
Final intensa
Ambos equipos llegaron a Roma buscando poner fin a una sequía de títulos en la Copa de Italia, ya que el Milan no había levantado el trofeo por última vez hace 22 años, perdiendo dos finales en ese lapso.
El partido se jugó a un ritmo alto desde el principio y ambos porteros realizaron impresionantes atajadas en los primeros 10 minutos.
Bologna impone condiciones
Conforme se desarrolló el juego, los dos equipos no cedieron terreno y las oportunidades al arco fueron nulas.
Ambos cuadros lucharon por todo por el resultado, al grado que minutos antes del descanso, el capitán del Bologna, Lewis Ferguson, quedó ensangrentado con lo que parecía una fractura de nariz tras una entrada deslizante sobre Rafael Leão, quien le dio en la cara con la pierna al caer de cabeza.
Bologna rompió el empate a los ocho minutos de la segunda parte. Riccardo Orsolini fue derribado por Theo Hernández en el área, pero el balón le cayó a Ndoye, quien se hizo un hueco y envió el balón al fondo de las piolas
Santiago no aportó mucho
Giménez entró a la cancha al minuto 62 y tuvo 27 minutos de juego en los que poco pudo aportar a la ofensiva del Diavolo que vio cómo se quedaron en la orilla del único título al que aún aspiraban en la temporada.
De esta manera, Bologna puso fin a una sequía de 51 años son logar el título de Copa, y evitó que los Rossoneros lograran su primera Copa en 22 años. Milan no logra una Copa de Italia desde el año 2003.
Esta derrota de los rossoneros podría significar el fin de la breve etapa de Sérgio Conceição al frente de los Rossoneri, con el Milan octavo en la Serie A tras una temporada decepcionante.
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