A 20 años del debut de Messi: la roja más rápida de su carrera
El 17 de agosto de 2005, Lionel Messi cumplió uno de sus sueños: debutar con la Selección Argentina a los 18 años. Lo que debía ser un día de gloria, terminó convirtiéndose en un recuerdo inesperado: apenas 43 segundos después de entrar al campo, vio la tarjeta roja directa.
Hoy, a dos décadas de aquel amistoso frente a Hungría, Vilmos Vanczák, el defensor que protagonizó aquella acción, comparte sus recuerdos y reflexiones sobre ese momento histórico.
¿Cómo recuerda Vilmos Vanczák el debut de Messi?
Vanczák, que tenía 22 años en ese entonces y hoy 42, confesó que aquel día se vivía una gran expectación:
"Fue un partido muy especial. Antes de entrar a la cancha todos hablaban de Messi. Era un jugador joven pero estaba destinado a ser un gran jugador. Queríamos enfrentarlos y ver cómo era Messi en cancha", recordó.
El defensor admite que apenas vio entrar al rosarino supo que debía seguirlo de cerca. "Jugó solo un minuto antes de la expulsión, pero alcanzó a verse que era muy, muy bueno".
¿Qué pasó en la jugada de la tarjeta roja?
A los 18 minutos del segundo tiempo, José Pékerman mandó a Messi al campo en lugar de Lisandro López.
En su primera jugada, Messi encaró por la derecha y dejó atrás a Vanczák, quien lo tomó de la camiseta. La Pulga intentó soltarse con un manotazo que rozó el rostro del defensor, y el árbitro Markus Merk no dudó en mostrarle la roja directa.
"Entró, me eludió fácilmente, pero yo no iba a dejar que llegue al gol fácil. Quería escapar de la marca, me tocó y yo soy defensor. Creo que la decisión fue un poco severa porque era un amistoso", explicó Vanczák.
El húngaro asegura que no hubo un plan especial para marcarlo: "Lothar Matthäus no pidió marca personal. A esta clase de jugadores había que seguirlos muy de cerca. Cuando entró supe que tenía que perseguirlo y pasó lo que pasó".
¿Hubo rencor o solo admiración?
A pesar de la expulsión, Vanczák guarda un profundo respeto por Messi:
"Recibí un pequeño golpe. Aunque era joven, ya estaba acostumbrado a recibir muchas faltas. Quería escaparse de la marca, darlo todo. Era su primer partido con Argentina, quería destacarse".
El húngaro recuerda con humor: "Siempre digo que pude detener a Messi y que solo yo conseguí sacarlo con una tarjeta roja... pero para nada fue agresivo. Creo que aprendió de esa situación".
También lamentó no haber podido intercambiar camisetas ese día, pero confía en que quizá algún día Messi se lo enviará. Además, celebró la carrera del argentino y su consagración en el Mundial de Qatar 2022: "Él es el gran punto del fútbol en su totalidad".
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