Damian Priest rompe el sueño de Drew McIntyre en WrestleMania XL
Philadelphia, Pensilvania.- El escenario de WrestleMania XL fue testigo de un emocionante regreso y una rápida caída para Drew McIntyre en la segunda noche del evento. Después de una intensa batalla contra Seth Rollins, McIntyre logró alcanzar la cima de Raw al derrotar a Rollins en un combate lleno de falsos finales y momentos de alta tensión.
Desde el principio, el combate estuvo lleno de acción cuando McIntyre abrió la contienda con un poderoso Claymore, aunque esto no fue suficiente para sellar la victoria en ese momento. La presencia de CM Punk en la mesa de comentarios añadió un elemento de distracción, pero McIntyre logró mantener el foco y finalmente conectó dos Claymore Kicks cruciales para asegurar la victoria sobre Rollins.
Sin embargo, la celebración de McIntyre se vio interrumpida cuando Punk lo confrontó y ambos intercambiaron insultos. McIntyre le advirtió a Punk que no vuelva, pero esto desencadenó un ataque por parte de Punk, quien se deshizo de su protector de brazo para golpear a McIntyre con patadas y provocar un caos en el ring.
El giro sorprendente llegó con la entrada de Damian Priest, quien activó su maletín Money in the Bank y aprovechó la oportunidad para atacar a un debilitado McIntyre. Priest llevó a McIntyre al ring y lo derrotó con su movimiento característico South of Heaven, arrebatándole así el campeonato en un giro dramático de los eventos.
La celebración de Priest, con el respaldo de CM Punk y Judgment Day, marcó un momento memorable en WrestleMania 40, con Priest proclamando su orgullo como boricua mientras alzaba el campeonato en la tarima, dejando a McIntyre con la amarga experiencia de un reinado efímero y una derrota inesperada.
