Robbie Williams se burla del Arsenal en el Emirates Stadium
Lo que debía ser una noche especial para los aficionados del Arsenal terminó con una mezcla de risas incómodas, abucheos y comentarios furiosos en redes sociales.
Robbie Williams, ícono del pop británico, se presentó en el Emirates Stadium el pasado viernes y, en lugar de ganarse el aplauso unánime del público, lanzó una broma que muchos consideran una provocación imperdonable.
¿Qué fue lo que dijo Robbie Williams en pleno Emirates Stadium?
Todo comenzó cuando pidió a los fans que aplaudieran si apoyaban al Arsenal, y luego, a los que no, que abuchearan. Pero la verdadera bomba llegó cuando preguntó, con tono burlón:
“¿Qué tan lejos está el Arsenal de ganar un trofeo europeo?”. Su propia respuesta encendió la mecha: “¡A cuatro malditas millas!”, haciendo referencia a la distancia entre el Emirates y el estadio del Tottenham, club que recientemente ganó la Europa League.
¿Reaccionó el público del Arsenal ante la provocación?
Aunque en el momento Robbie intentó suavizar la tensión aclarando que solo se trataba de una broma y pidió no tomarlo personal, la reacción no tardó en llegar, sobre todo en redes sociales.
Aficionados del Arsenal expresaron su enojo y decepción, argumentando que un invitado no debería burlarse del equipo que lo recibe. Muchos calificaron el momento como una falta de respeto, especialmente considerando que el show se llevó a cabo en el propio estadio del club.
Sin embargo, hubo también quienes defendieron a Williams, señalando que el comentario fue parte del clásico humor británico, cargado de ironía futbolera.
¿Hubo alguna respuesta por parte del club o sus seguidores?
Aunque el club no emitió ningún comunicado oficial, una de las respuestas más aplaudidas vino desde la afición misma: varios usuarios recordaron que el equipo femenil del Arsenal recientemente se coronó campeón de la UEFA Women’s Champions League, devolviendo el golpe con elegancia y orgullo.
Esta respuesta no solo sirvió para contrarrestar la burla de Williams, sino también para destacar los logros del fútbol femenil, muchas veces minimizados. La polémica sigue viva, pero si algo dejó claro este incidente, es que en el norte de Londres el orgullo gunner no se toca… ni en broma.
